2011 – El crecimiento

Introducción

POESÍA EN PARALELO CERO 2011:

LA POESÍA COMO SALVACIÓN

 

Xavier Oquendo Troncoso

 

La poesía nos salva y nos salvan las palabras y sus significados, porque el paisaje, el mar, las montañas, el sol equinoccial, las estrellas de la mitad del mundo, la selva y su sonido de pájaros, los valles nutridores, el campo con su música de grillos, el colibrí y su pico de miel, las noches pinceladas por la melodía sideral de las estrellas son nuestros significantes: los símbolos sagrados que nos ha entregado la naturaleza.

 

El Encuentro internacional de poetas “Poesía en paralelo cero” tiene como objetivo que la palabra de la patria pequeña se una con las otras patrias, se junten en un abrazo, en la plaza grande de la patria de la lengua: la palabra que suena en español, en el castellano que nos trajeron, en el idioma de Garcilazo, de Quevedo, de Góngora; en el idioma de Gabriela, de Pablo, de Vicente; en el idioma con el que se creó Comala y Macondo; en el idioma con el que el Borges dejó de ser “George”, en el idioma en el que Cortázar vivió el efecto de la Maga. Esa es nuestra patria grande, ese es nuestro mayor compromiso: vencer las barreras de los otros idiomas y seguir siendo el lenguaje de Asturias, de Paz, de Vargas Llosa, ese que creó el universo de la poesía de Vallejo, el de la generación del 27, el de la música pura de la poesía de la negritud latinoamericana.

 

Por ello el encuentro “Poesía en paralelo cero” es una verdadera junta. Una reunión donde brilla el idioma, donde el principal interés consiste en sabernos escuchar, en buscar la forma para conseguir hacerlo. La historia de una nación es también la historia de su lengua. Y se sabe que la historia de un idioma no se hace en las academias, sino en la universidad de las palabras.

 

En este año el encuentro se llenó de gusto al tener la visita de grandes poetas de nuestra lengua así como de lenguas hermanas en nuestro país. En el libro que se publicó en este año se deja la muestra poética, como una memoria, de los treinta poetas invitados en la tercera edición: el poeta español Vicente Valero, de las islas Baleares y los poetas hispanos Alfredo Pérez Alencart, nacido en Perú, y Rodolfo Häsler, nacido en Cuba. Los mexicanos: Marco Antonio Campos, de gran trayectoria, y Rocío Cerón, poeta joven. Además en este encuentro presentamos la antología Poesía Contemporánea del Ecuador: “De César Dávila a nuestros Días”, publicada en la prestigiosa editorial mexicana “La Cabra Editores” dirigida por la extraordinaria editora María Luisa Martínez, e impresa por la Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión”. La editora mexicana ha sido invitada al encuentro para la presentación del libro y para que ella reconozca las voces y las sensibilidades que nos unen. El encuentro también tuvo la fortuna de tener entre sus invitados a Juan Felipe Robledo de Colombia, Gabriel Chávez Cazasola, de Bolivia, Juan Cameron, de Chile; Carmen Ollé, de Perú y de nuestra lengua hermana y país hermano Brasil, a Floriano Martins, poeta hispanohablante. Por Ecuador tenemos la suerte de contar con una gran delegación de 19 poetas: Rodrigo Pesántez Rodas, Sara Vanegas Coveña, Margarita Laso, Roy Sigüenza, Victoria Tobar, Argentina Chiriboga frente a poetas más jóvenes y que están en el camino: Ana Cecilia Blum, Franklin Ordoñez, Lucrecia Maldonado,  Juan Carlos Astudillo, Santiago Vizcaíno, David Sánchez, Omar Balladares, Aníbal Fernando Bonilla y Cristian Londoño, en suma con dos vates que consiguieron el reconocimiento en nuestro primer concurso nacional de poesía “Paralelo cero” para poetas que han publicado un libro o no lo han hecho aún: la poeta ganadora Sonia Montenegro, de quien presentamos, dentro del marco del Encuentro, la edición del libro ganador: “La miel del silencio”, así como Marcelo Silva, el poeta finalista de la terna. 

Poetas de todo el Ecuador (Quito, Guayaquil, Cuenca, Ambato, Esmeraldas, Portovelo, Loja, Azogues, Milagro, Manta y Otavalo son las ciudades de donde provienen nuestros representantes) unidos con los poetas internacionales por el idioma y la sensibilidad: la complicidad perfecta para la comunión y la convivencia.

 

Que todo sea por La poesía es un pretexto para luchar, en estos tiempos de deshumanización y dolor, contra el mal, contra la pesadumbre, contra el fin de los tiempos, contra el ser humano que quiere auto inmolarse, contra los gritos de los hombres y mujeres, el grito del animal, el grito de los bosques, de la selva, del agua. Mientras otros se matan, mientras otros se insultan, mientras otros se odian, nosotros estamos leyendo poesía y haciendo el intento de escribirla para salvarnos y también para reunirnos, para saber que no estamos solos. Que siempre habrá un poema, un chocolate, un libro, un café que nos acompañe, aquí, justo aquí, en la ciudad de la mitad del mundo, donde la poesía y las montañas andinas nos acogen como si se tratara del amor en su expresión máxima. Ni más ni menos.

 

 

 

 

 

 

El poeta homenajeado el año 2011 fue Rubén Astudillo y Astudillo. Su palabra impredecible y tenaz es agua fresca en nuestra tierra, y una cierta alegría invencible nos recibe en sus versos, siempre nuevos, como soles venidos de tierras distantes, generosos con los pájaros nuestros.

15 (Elegías de la carne)

 

Así
fuimos. Ahora
no son únicamente das calles,
que se
agrandan entre
los dos. Tampoco
son los días que
nos van
alejando
y absorbiendo hasta el nombre. Es
que ni siquiera
ahora
nos sabemos dónde. Es que no
adivinamos
a sabernos cómo. Es que ya
nunca nos cuándo.
Es
que yo
para ti. Es
que tú
para mí. Es
que los
dos pa ra
los
dos ya estamos
muertos. Ves? Me están oyendo. Ya
ni siquiera somos.


Participantes

Nacionales

ECUADOR

  • Argentina Chiriboga
  • Roy Sigüenza
  • Rodrigo Pesántez
  • Victoria Tobar
  • Santiago Vizcaíno
  • Franklin Ordóñez
  • David Sánchez
  • Omar Balladares
  • Cristian Londoño
  • Lucrecia Maldonado
  • Aníbal Fernando Bonilla
  • Ana Cecilia Blum
  • Sonia Montenegro
  • Marcelo Silva

Internacionales

MÉXICO

  • Marco Antonio Campos
  • Rocío Cerón
  • María Luisa Martínez

COLOMBIA

  • Juan Felipe Robledo

PERÚ

  • Carmen Ollé

BRASIL

  • Floriano Martins

ESPAÑA

  • Vicente Valero
  • Alfredo Pérez Alencart
  • Rodolfo Häsler

CHILE

  • Juan Cameron

BOLIVIA

  • Gabriel Chávez Cazasola

Testimonios

ECUADOR

para Xavier Oquendo, hermano

 

A la selva, Señor, donde las raíces aladas

nos restituyen inocencia, esperanza y vida.

Alfredo Gangotena

I El canto no es flor solamente Sino soroche pasados los cinco mil arriba del Pichincha, Dios mío invocado bajo el volantín de los vientos desbarbarizándome del grito que no responde de mí. Ah devota ternura cuando a solas, cuando coloreamos sueños con la música envolvente de nuestros cuerpos desvistiéndose de felicidad profunda. Mate de coca tiene que llamarse este alboroto del amor sobre la ciudad descubierta con sus galas y miserias: Brilla, brilla, brilla lo que estoy diciendo sin cabalgar sobre las vértebras del caballo, sin respirar los humos enlutados de la horrible congestión, vehículos luchando mano a mano dentro de un nudo corredizo que ha advenido en serpenteante desmesura. Pero por ahí los volcanes se alzan cual moles radiantes que no se quitan de nuestra visión, herida por la orfandad de unas criaturas. Momento del vértigo y poder del músculo que no se amansa en mi lado izquierdo. II Otavalo convence porque acelera los afectos, los hierve hasta embriagarnos la noche del primer connubio: Afuera se escucha su comercio, plazas y calles derrotando al feo estandarte del no hay trabajo; adentro se aloja lo posible, su corazón lleno de palomas, su testimonio de reconciliación… Oh tierra del Imbabura a cuyo pie atisbo un lago donde todo recomienza para el bello uniforme verde del valle. Ya no pregunto nada: me sitian canciones con dueño, cascadas como las de Peguche con su recatado arcoiris, versos que tejen chompas mientras duermo ardido entre los cabellos de la mujer mía por tantas estaciones que no tienen hora fija en el vivo abanico de su eléctrica realidad creciendo a la velocidad del Dios que nos resucita, una y otra vez, para amarnos hasta el penúltimo aliento. Lentamente Otavalo ensancha su paisaje y su marca secreta mitológicamente andina, estelar en la gran bandeja donde se entrega a crecer dando noticia que su motor no se detiene. III A favor de nosotros el calor de Esmeraldas y la espuma de su mar ahora sin revuelo, perdiendo peces para el encocado que nos llena el vientre, mar pródigo salándome la piel entre arenas y rocas allá por Atacames. Hay quienes bailan cuando hace falta, marimbeando sus cuerpos ante nuestros párpados abiertos: A cada movimiento se dispara una bengala que alumbra África y América por varios siglos de cadenas rabiosamente cortadas en el instante precioso del escape para la fecundación y el poblamiento. La vida siempre es un impulso implorante al Dios que ya no expulsa a los trastabillantes. Mi poesía es oración enroscada a los congéneres empobrecidos, mi poesía heredó una semilla que pertenece a las migraciones del mar. Esmeraldas retiene eternidad para que demos testimonio del cántico sagrado de las Épera del río Cayapas. Esmeraldas salta con su clima para que no se fastidien nuestros pulmones. Esmeraldas nos hace bailar hasta en un día de pena.
IV Ambato, donde Victoria Tobar reina con su gozo nuevo que es antiguo y delicado girasol sin desnucarse. Quito, donde Marcelo Silva me dona dos antologías en las que él no está. Baños, donde Julio Pazos nació para luego ser mi amigo. Cuenca, donde Juan Carlos Astudillo ensaya madurez. Quito, donde Julia Erazo des-silencia lo que por lustros acopió. Guayaquil, donde Omar Balladares da clases a colegiales mientras destila la claridad de su horizonte. Quito, donde César Ramiro dedica su primer poemario. Otavalo, donde Ariruma Kowi tiene miedo que otras manos destruyan su tierra y sus tejidos. Quito, donde Diego Oquendo alza la voz que fastidia a los ensorbecidos. Tulcán, donde Sonia Montenegro sube a las cumbres hasta que divisa el mar. Quito, donde reencuentro a Patricio Burbano soñando cine. Azogues, donde aún se oyen las risas de Rodrigo Pesántez. Portovelo, donde Roy Sigüenza sigue sin enviarme el libro prometido. Quito, donde Sandra Zaldumbide despide a sus visitas con lágrimas contagiosas. V Ecuatoriando voy, subido a autobuses de hierro, pasando cordilleras, escuchando maltrechos latidos de la tierra que ahora escarban al norte de Esmeraldas. Creerán que me falta el feudo enorme del Napo y del Pastaza, pero esa selva la llevo puesta desde que nací. Creerán que me falta mencionar La Compañía, pero esa ostentación de la fe la he cambiado por el Evangelio que se desvive por los desprotegidos. En la sierra elegí una piedra para el crepúsculo. Aún así, voceo como si fuese otro Quijote que, dentro del mejor de los sueños, busca recuperar su manera de existir: “A la selva, Alfredo, para no estar atareados en nosotros mismos”. Escrito en Salamanca el 20 de junio de 2011, tras el Tercer Encuentro Poesía en Paralelo Cero. Publicado en el poemario ‘Cartografía de las Revelaciones’ (Verbum, Madrid, 2012).

Manuscritos

BOLETIN N. 164
SEGUNDO PREMIO NACIONAL DE POESIA PARALELO CERO, 2012

La Editorial ELANGEL Editor,  la Casa de la Cultura Ecuatoriana y el Encuentro Internacional de Poetas Poesía en Paralelo Cero convocan al SEGUNDO CONCURSO NACIONAL DE POESIA PARALELO CERO, 2011 – 2012, en el que podrán participar autores ecuatorianos o nacionalizados de cualquier edad que residan en el país y que no hayan publicado más de un libro de poesía de forma individual.

 

Los originales presentados deberán estar escritos en castellano. La extensión y el tema de los libros se dejan a criterio de los autores, quienes tomarán en cuenta las dimensiones habituales de los libros de poesía (mínimo de 300 versos y máximo de 1.200 aproximadamente).

 

Los trabajos serán inéditos. Se presentarán  por triplicado, mecanografiados o impresos. Estarán debidamente anillados o encarpetados. No se aceptarán originales ni copias mal presentadas o ilegibles. Ni tampoco envíos por correo electrónico.

 

En la portada de los manuscritos, se hará constar el título de la obra y el seudónimo, con el que el autor firma el trabajo. Se adjuntará un sobre cerrado que contendrá el nombre del autor, fotocopia de la cédula de identidad, dirección postal, e-mail y teléfonos (convencional o celular), además de un breve currículo de no más de 10 líneas. En el anverso del sobre se escribirá el seudónimo y el nombre de la obra.

 

Se entregará un único premio al mejor libro de poesía que consistirá en la publicación del libro ganador. Los derechos de autor se entregarán al ganador con la cantidad de 150 ejemplares de libros, además, de la participación en el cuarto Encuentro Internacional de Poetas POESIA EN PARALELO CERO 2012, en el que presentará su libro dentro del evento tanto en Quito, como en las ciudades donde el encuentro se dé en dicho año.

 

La composición del Jurado se hará pública en el momento de la adjudicación del premio, en el mes de febrero del 2012. Sus decisiones serán inapelables.

 

El plazo de presentación de trabajos vence el 31 de noviembre del 2011, y se enviarán a la siguiente dirección: CONCURSO NACIONAL DE POESIA PARALELO CERO 2011, Editorial El Ángel Editor, Casa de la Cultura Ecuatoriana, Departamento de Comunicación Social, Av. 6 de diciembre y Patria, Quito-Ecuador.

 

Mayor información solicitar al teléfono 2905260, Ext. 119, del Departamento de Comunicación Social de la CCE.

 

 

P.R.

LOS LIBROS QUE DEJA UN ENCUENTRO

Tres libros de poesía nos dejó el Tercer Encuentro Internacional de Poetas en Ecuador “Poesía en Paralelo Cero” 2011, que tuvo su sede en Quito, dentro del Programa “Quito: Capital Americana de la Cultura”, en el mes de junio. El evento organizado por el poeta Xavier Oquendo Troncoso, con el auspicio del Municipio de Quito presentó en el marco del evento los siguientes textos poéticos importantes para la lírica nacional e hispanoamericana:

Poesía en paralelo cero 2011. Editado por el Encuentro y publicado en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, el libro reúne la muestra de los 30 poetas que formaron para del evento internacional. Por sus páginas se pueden leer poemas representativos de los autores nacionales y extranjeros que fueron invitados a los distintos actos organizados en el magno evento que tuvo como sede nuestra ciudad, pero que también contó con la participación de otras ciudades del Ecuador para el desarrollo de su programación: Ciudad Mitad del Mundo, Machachi, Otavalo, Ibarra, Esmeraldas y Atacames. Poetas como Marco Antonio Campos de México, Gabriel Chávez Cazasola de Brasil, Floriano Martins de Brasil o Carmen Ollé de Perú, así como Margarita Laso o Rodrigo Pesántez Rodas de Ecuador, pueden ser leídos en el libro.

Otro libro que circula luego del Encuentro es La miel del silencio de la joven poeta carchense Sonia Montenegro. El libro editado por El Ángel Editor, con el auspicio del Ilustre Municipio de Quito, es el poemario ganador del Primer Concurso Nacional de poesía “Paralelo Cero” 2010 – 2011.  El libro fue elegido entre 51 poemarios de gran factura por un exigente jurado conformado por los poetas cuencanos Sara Vanegas, Catalina Sojos y Jorge Dávila Vázquez. Sonia Montenegro es una joven poeta de 22 años, nacida en Tulcán, que forma parte de los talleres literarios de la Casa de la Cultura. Su poesía impresiona por su altísima calidad y sus poderosas formas de comunicación con el lenguaje poético.

El tercer libro que circuló en el evento es la Antología de la poesía ecuatoriana contemporánea. De César Dávila Andrade a nuestros días. Selección y presentación: Xavier Oquendo. El libro fue editado en México por la prestigiosa editorial de poesía La Cabra Ediciones e impreso en la Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión”. El grueso ejemplar de casi 600 páginas, contiene a 99 poetas ecuatorianos nacidos desde 1918, año de nacimiento de Dávila Andrade, hasta 1980. Son cuatro generaciones de poetas en el Ecuador que son analizados por la pluma de Oquendo en un sesudo estudio sobre la poética nacional. La presentación del libro contó con la presencia de María Luisa Martínez Passarge, editora de la importante firma editorial mexicana. La Antología está dividida en siete grandes ejes temáticos: 1. Filosofía y concepto, 2. Erotismo e intimidad,  3. Humanismo y sociedad, 4. Experimento y novedad,  5. La experiencia, 6. La contemplación y la imagen y 7. Lo urbano e impersonal), además de un espacio especial llamado “Los referentes” en donde están los dos nombres indiscutibles de la poesía del siglo XX en el Ecuador: Dávila Andrade y Jorge Enrique Adoum.